El río San Juan discurre plácidamente entre la Sierra de Guadarrama y el Duratón, al cual cede sus aguas, por el nordeste de la provincia de Segovia. A lo largo de su curso se han levantado iglesias que se han poblado de gentes venidas en su mayoría del norte de la Península; castillos en una tierra de frontera que era necesario afianzar ante el enemigo que vino del Sur. A lo largo de sus orillas el hombre supo sacar el máximo rendimiento construyendo molinos, roturando sus vegas para campos de labor y aprovechando sus frondosas arboledas para madera, barro, piedra y levantar sus nuevos hogares.
A partir de la década de los 50 del s.XX se produce un nuevo movimiento migratorio. Las gentes del campo castellano y Segovia no fue una excepción, parten hacia los núcleos industriales del norte y hacia las grandes capitales, en especial Madrid, en busca de un futuro mejor. Lentamente los pueblos y aldeas del nordeste segoviano se van despoblando, las casas se van desmoronando bajo el peso de los años, y el tiempo extiende un manto de olvido y silencio.
Ajeno a la historia de los hombres, las agua del río San Juan han seguido corriendo desde la noche de los tiempos. La sobra del buitre leonado se proyecta desde los altos riscos de los cañones que el río, ya casi en su desembocadura en el río Duratón, ha horadado con el paso de los siglos, quizá como tributo y admiración a su conocido y famoso hermano mayor.
En el entorno se encuentra; El Parque Arqueológico de los Enebralejos que reproduce el ambiente de un poblado prehistórico del inicio de la edad de los metales, hace más de cuatro mil años. A través de sus cabañas, utensilios domésticos, armas, cultivo o talleres, es posible conocer las formas de vida de sus habitantes.
La Cueva fue descubierta a principios de los años treinta. Fue utilizada como necrópolis entre los años 2120-1850 a.C. y en su interior sorprenden las formaciones y variedad de colores. [Dicha cueva será objeto de visita nuevamente en una futura actividad]
Ruta de senderismo entre la Sierra de Guadarrama y el Río Duratón ; caminando junto al río San Juan
Distancia 20 kms; Desnivel: 270 metros.
Castroserna de Abajo; Pequeño pueblo en la que contemplar con sosiego su iglesia, sus casas de arquitectura castellana y sus corrales fundidos con los muros rojizos del cañón.
San Miguel de Neguera; Encontraremos un amasijo de piedras que a duras penas se mantienen de pie y restos del molino, del que fuera otro pueblo castellano.
P.D.: En la ruta deberemos vadear el río San Juan.