El río San Juan discurre plácidamente entre la Sierra de Guadarrama y el Duratón, al cual cede sus aguas, por el nordeste de la provincia de Segovia. A lo largo de su curso se han levantado iglesias que se han poblado de gentes venidas en su mayoría del norte de la Península; castillos en una tierra de frontera que era necesario afianzar ante el enemigo que vino del Sur. A lo largo de sus orillas el hombre supo sacar el máximo rendimiento construyendo molinos, roturando sus vegas para campos de labor y aprovechando sus frondosas arboledas para madera, barro, piedra y levantar sus nuevos hogares. El Parque Arqueológico de los Enebralejos reproduce el ambiente de un poblado prehistórico del inicio de la edad de los metales, hace más de cuatro mil años. A través de sus cabañas, utensilios domésticos, armas, cultivo o talleres, es posible conocer las formas de vida de sus habitantes. La Cueva fue descubierta a principios de los años treinta. Fue utilizada como necrópolis entre los años 2120-1850 a.C. y en su interior sorprenden las formaciones y variedad de colores.
Senderismo por el mágico “Río San Juan” y Parque Arqueológico de los Enebralejos