Donde el río Manzanares abandona las rampas y desniveles de la Sierra de Madrid y se adentra en las tierras pre-mesetarias encontramos un pequeño cañón natural que el paso del tiempo y la fuerza y tesón de las aguas ha escarbado en este arenoso terreno.
El río Manzanares nace en la vertiente meridional de la Sierra de Guadarrama, en el lugar denominado Ventisquero de la Condesa en el Alto de Guarramillas a 2.160m de altitud desembocando en la margen derecha del Jarama, afluente este del Tajo; discurre en su totalidad dentro de los límites de la Comunidad de Madrid.
Nos encontraremos con restos de molinos de cubo y junto a ellos alguna piedra de moler en los alrededores, con más o menos horas de trabajo.
PARQUE REGIONAL DE LA CUENCA ALTA DEL MANZANARES;
Es el espacio natural protegido más amplio de la Comunidad de Madrid. Alberga algunos de los Ecosistemas mejor conservados de la misma, se distribuyen entre las altas cumbres de la Cuerda Larga y las inmediaciones del Monte de El Pardo, con sotos fluviales, zonas húmedas, tupidos bosques y el excepcional paisaje de La Pedriza del Manzanares.
PUENTE DE LA MARMOTA;
Hace límite entre los términos de Colmenar Viejo y El Pardo. Su arco de medio punto es de 12 m de luz y 11,5 m de altura, formado por 46 dovelas graníticas de época moderna. El arco se apoya en la roca viva.
Su longitud es de 45m y anchura de 4,7m en el interior de la balaustrada, que está formada por grandes bloques de granito de unos 96cm de altura y 37cm de altura.
Es importante destacar dos cuestiones: el cambio de rasante que presenta en su parte superior al inclinarse desde los extremos hacia el centro del puente, y los restos del enlosado en las entradas.
El puente es conocido como "Marmota", según se encuentra escrito en las cédulas reales en el Siglo XVI. Su nombre moderno se debe a una ultracorrección, algunos autores atribuyen su construcción a los árabes o mudéjares.
EL MONTE DE EL PARDO
El Monte de El Pardo con una superficie de 15.351 Ha, es una magnífica muestra del encinar carpetano propio de la Comunidad de Madrid, con bosques adehesados de encina, alcornoques dispersos y enebro de la miera.
No se encuentra dentro del PRCAM, aunque colinda con él en su límite inferior y está gestionado por Patrimonio Nacional. Está prohibida la visita a la mayor parte de su territorio, razón por la que probablemente se haya conseguido mantener su entorno en condiciones casi primigenias, lejos de la acción devastadora del hombre.